Detección mediante Cable sensor de Temperatura

La detección de incendios mediante cable térmico, también conocido como cable sensor de temperatura o detector lineal de calor, es una tecnología avanzada diseñada para ofrecer una detección rápida, precisa y continua del calor a lo largo de grandes superficies o instalaciones lineales. A diferencia de los detectores puntuales convencionales, este sistema detecta el aumento de temperatura en cualquier punto de su recorrido, proporcionando una cobertura homogénea y fiable incluso en entornos hostiles.

La detección de incendios mediante cable térmico constituye una solución fiable, robusta y adaptable, especialmente indicada para instalaciones críticas o de difícil acceso. Su capacidad para detectar el fuego desde el primer incremento de temperatura garantiza una respuesta temprana, reduciendo daños materiales, riesgos operativos y tiempos de inactividad.

En Con3xia, somos expertos en la selección, diseño e instalación de sistemas de detección lineal de temperatura, asesorando a cada cliente para implementar la tecnología que mejor se adapte a su entorno y nivel de protección requerido.

El cable térmico está compuesto por conductores especiales aislados con materiales sensibles al calor. Cuando la temperatura alcanza un valor predefinido o se produce un incremento anormal, el aislamiento se altera o cambia su resistencia eléctrica, generando una señal que el sistema de control interpreta como una alarma de incendio o sobrecalentamiento.

Existen dos tipos principales de cables detectores:
• Cables digitales: Activan la alarma al alcanzar una temperatura fija en un punto determinado.
• Cables analógicos: Permiten una detección continua, indicando el punto exacto del incidente y registrando variaciones térmicas progresivas.

• Cobertura lineal continua: Detecta incendios a lo largo de toda su extensión, sin zonas ciegas.
• Alta resistencia ambiental: Soporta condiciones extremas de temperatura, humedad, polvo, vibraciones o productos químicos.
• Instalación versátil: Puede colocarse en bandejas de cables, túneles, cintas transportadoras, aparcamientos, silos, galerías de servicios o techos industriales.
• Bajo mantenimiento: No requiere calibraciones frecuentes ni componentes mecánicos expuestos.
• Integración sencilla: Compatible con sistemas convencionales de detección y centrales de alarma contra incendios.

Este tipo de detección es especialmente recomendable en entornos donde los detectores de humo o llama no son eficaces debido a las condiciones ambientales o la ventilación forzada. Algunos ejemplos de aplicación son:
• Túneles de carretera y ferrocarril
• Bandejas portacables y cuadros eléctricos
• Almacenes industriales y naves logísticas
• Cintas transportadoras
• Depósitos, silos o tanques de almacenamiento
• Plantas energéticas, petroquímicas o de reciclaje